IGLESIA DE LOS JERONIMOS

Aunque sea conocida popularmente como Iglesia de los Jerónimos, su nombre completo es San Jerónimo el Real. Se encuentra situada en lo alto del Prado Viejo, se trata de la iglesia del antiguo monasterio de San Jerónimo el Real, fundado por Enrique IV en 1464 junto al camino de El Pardo, y trasladado a Madrid en 1503 bajo licencia de los Reyes Católicos, que les sirvió de aposento cuando estaban en la Villa. De esta época por tanto debieron ser el convento –hoy desaparecido- y la iglesia que actualmente conocemos.

No tardó este convento en convertirse en uno de los lugares más emblemáticos de la Villa, hasta tal punto que su iglesia fue elegida para la jura de los Príncipes de Asturias como herederos de la Corona, siendo el primero en jurar Felipe II el 18 de abril de 1528, y la última Isabel II el 20 de junio de 1833. Además, los reyes disponían en el convento de un cuarto o aposento (Cuarto Real) que mandó construir Felipe II junto al evangelio en el presbiterio y que servía a los monarcas de lugar de retiro, meditación, y duelo en los días de luto familiar. De esta idea inicial se acabaría construyendo el Palacio del Buen Retiro, junto al monasterio.

En 1808, durante la Guerra de la Independencia, los frailes fueron expulsados y parte de las tropas francesas se acuartelaron en el convento, ocasionando grandes desperfectos en el edificio. Posteriormente Fernando VII lo convirtió en el cuartel de Artillería. Años después se restaura, y fruto de éllo son las torres que flanquean el ábside.

En el año 1878 se cede el templo al Arzobispado, que lo reforma dándole su aspecto actual. En 1905 se construyeron la escalinata y el atrio para la celebración de la boda de Alfonso XIII.

En cuanto a la iglesia, Monumento Nacional desde 1925, está realizada en estilo gótico y es muy parecida a la de otros monasterios de la orden como el de Santa María del Parral en Segovia. Se levanta sobre una planta de cruz latina y está compuesta por una nave central, crucero y cinco capillas por cada lado de la nave cerradas por arcos ojivales.

Por último, decir que hasta hace poco tiempo estuvieron en pie, a la derecha de la iglesia, los elegantes arcos del claustro del convento, hoy desmantelados con motivo de las obras de ampliación del Museo del Prado, estando previsto la construcción en este lugar histórico del polémico edificio proyectado por el arquitecto navarro Rafael Moneo.