PUERTA DEL SOL

Se la considera como el centro teórico de Madrid y desde aquí comienza la numeración de todas las calles. También aquí se encuentra el kilómetro cero de todas las carreteras de España.

El nombre proviene de que en este lugar existía una muralla y por uno de sus postigos entraba el sol; otros dicen que se debe a que encima de la puerta de la muralla aquí situada estaba dibujado un sol por estar orientada hacia el levante. Esta muralla fue derribada en 1570 para posibilitar el crecimiento de Madrid.

Aquí se encontraba uno de los mentideros más conocidos de Madrid durante el Siglo de Oro: las gradas de San Felipe (escalera de la Iglesia de San Felipe, que se encontraba en alto ocupando la manzana formada por las calles de Esparteros, calle del Correos y calle Mayor). Aunque importante lugar de encuentro, no se consideraba una plaza definida, y ocupaba la mitad de lo que ocupa actualmente. La plaza empezó a ordenarse urbanísticamente tal y como hoy la conocemos en base a la Casa de Correos; con la desamortización de Mendizabal se derribaron muchos de los edificios que allí se encontraban (Convento de San Felipe, Convento de Nuestra Señora de las Victorias), y se construyeron edificios de viviendas en el lado opuesto a la Casa de Correos. En 1959 se reforma introduciendo una zona ajardinada y fuentes. En 1986 se vuelve a reformar para dar más importancia a la zona peatonal.

La Casa de Correos surgió ante la idea de centralizar el servicio de correos. Así Ventura Rodríguez recibió orden de derribar los edificios que allí se encontraban, pero será Carlos III quien en 1768 le encargue la construcción a Jaime Marquet. Fue sede del Ministerio de Gobernación, Dirección General de Seguridad del Estado, siendo en la actualidad sede de la Comunidad Autónoma de Madrid. Es aquí donde se encuentra el reloj desde el que cada 31 de diciembre se anuncia el comienzo del nuevo año, con la tradicional toma de las doce uvas.

También en la Plaza se encuentran la estatua de “El oso y el Madroño” símbolo de Madrid, actualmente al inicio de la Calle del Carmen, y a partir de 1994 la estatua ecuestre de Carlos III, réplica de la original que se encuentra en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. Dicha estatua tiene una inscripción rodeando el pedestal contando la historia del reinado de Carlos III.